Cómo CREAR Una APP Móvil Desde CERO [+TIPS]

¿Se te ha ocurrido una buena idea para una crear una aplicación móvil en la que nadie haya caído antes y que estás seguro que será muy popular? ¿Te han hablado de las ventajas de las apps nativas y estás valorando diseñar una app móvil para tu negocio? ¡Estás en el sitio correcto! Uno de los problemas más habituales en el mundo de las apps es que, aunque tengas una buena idea o muy claro lo que quieras, no sabes por donde empezar. Desde el diseño y la construcción hasta la promoción y optimización de la aplicación móvil te surgen un mar de dudas que es fácil disipar y que a veces provocan que desistas. En esta guía te voy a explicar, paso a paso, todo el proceso que conlleva crear una app móvil nativa (no confundir con una app progresiva o PWA) y todas las ventajas que tiene.

Es una realidad que existe una aplicación móvil para prácticamente cualquier necesidad, tipo de negocio o actividad. Ya puedes descargar apps para pedir un taxi, comprar tu ropa favorita, estar en contacto con los tuyos, probar cómo te queda el pelo de otro color, reservar un restaurante y un largo etc. Aunque parezca que el mundo de las apps no tenga fin, es proceso de crear desde cero una aplicación móvil puede y conseguir que los usuarios se la descarguen es una tarea ardua que necesita de alguien que tenga conocimientos previos y experiencia en el sector.

Yo llevo gestionando el diseño y desarrollo de apps desde hace años y, si te soy sincero, nunca sé lo suficiente y siempre hay obstáculos con lo que tengo que lidiar. Es normal no saber por donde empezar y, por mucho que te lo explique, es probable que pidas ayuda profesional (cosa que te recomiendo). Piensa que el diseño y desarrollo de una app nativa, aparte de ser largo (aunque hay excepciones), requiere que tengas muy claro las funcionalidades de la app y las fuentes de datos. Después, una vez construida, hay que testearla e ir mejorándola día tras día (es algo que los usuarios te van a exigir), sin mencionar que también hay que hacer SEO en las tiendas de apps (ASO) y promocionar la app por todos los canales posibles. Deja que te explique qué pasos debes conocer a la hora de crear una app para tu negocio o para tu idea.

Según la wikipedia una aplicación móvil es una aplicación informática diseñada para ser ejecutada en teléfonos inteligentes, tabletas y otros dispositivos móviles. Las aplicaciones permiten al usuario efectuar un conjunto de tareas de cualquier tipo facilitando las gestiones o actividades a desarrollar. A diferencia de las PWA, se desarrollan y son válidas para cualquier sistema operativo al basarse en tecnología web y son compatibles con cualquier dispositivo y sistema.

Las aplicaciones móviles nativas se desarrollan para un sistema operativo en concreto.

Una aplicación móvil nativa se desarrolla de manera específica para un sistema operativo en concreto (por ejemplo, para Android, iOS o Windows). En el caso de iOS el lenguaje nativo que utilizan es Objective C y Swift, mientras que en Android el lenguaje de programación es Java y Linux. Además, este tipo de aplicaciones tienen que ser descargadas en tu propio teléfono móvil para poder hacer uso de ellas. Por su parte, las PWA se desarrollan con lenguaje HTML, CSS y Javascript. ¿Qué significa esto? Que después de haber accedido por primera vez a una PWA, puedes guardar un acceso directo en el escritorio y acceder sin necesidad de pasar por un navegador o de tener conexión a internet.

Hay muchos negocios y sectores en los que tener una pagina web, blog o tienda online no es suficiente. ¡Piénsalo! Imagínate pedir un taxi a través de una web… ¿sería raro no? La razón es porque las empresas de ese sector te han acostumbrado a apps muy potentes, y llega un momento que ni piensas en su web (¿la tienen?). Hay otros sectores y empresas que van evolucionando en esta dirección, y en donde crear una buena app puede convertirse en una ventaja competitiva. La realidad es que diseñar y desarrollar una app móvil que sea útil y que cubra las necesidades de tu público objetivo te va a ofrecer múltiples ventajas:

Necesitas una app que facilite y ayude a tus clientes añadiendo además un valor que haga que te diferencies respecto a tu competencia. Esto se debe a que todo el mundo cuenta con un smartphone y hoy en día la gente realiza casi todas sus compras y sus búsquedas a través de estos. Por lo tanto necesitas claramente aplicación móvil que mejore tu visibilidad y la experiencia del usuario.

Las aplicaciones móviles además permiten añadir unas ciertas funciones que aportan un gran valor añadido con respecto a la web normal, además de facilitar la navegación y hacerla más intuitiva también tiene mucho que ver la utilidad y sencillez que ofrecen este tipo de soluciones digitales a los usuarios, desde el propio dispositivo móvil. En definitiva, las apps móviles están llevando la experiencia de usuario de los dispositivos móvil a un nuevo nivel. Por todo ello, te recomiendo que pienses en la posibilidad y las ventajas de crear una aplicación para mejorar distintos aspectos dentro de tu negocio, y cuanto antes mejor ya que tus competidores seguro que ya te están tomando ventaja.

Una vez que ya sabes los beneficios de crear una aplicación móvil para tu negocio, es el momento de que te explique los pasos que debes seguir (tanto si creas la app tú mismo como si contratas a una agencia o desarrollador). En el camino te vas a dar cuenta que, antes de empezar a diseñar, tienes que tener muy claros una serie de conceptos que te serán muy útiles a la hora de saber exactamente qué es lo que quieres, qué presupuesto necesitas y qué funcionalidades debe tener tu aplicación. Si lo tuviese que resumir, diría que el diseño de apps, como vas a ver ahora mismo, debe ser un proceso organizado y sistemático que debe ser ejecutado por personas experimentadas.

Los empresarios que han tenido éxito en el desarrollo de apps móviles han sido capaces de resolver problemas de los usuarios de una manera simple.

Si eres de lo que piensa que diseñar una app móvil es fácil es mejor que empieces a cambiar tu opinión, ya que no basta con tener las cosas claras y tener a un buen equipo contigo. También es necesario comerse la cabeza, ponerte en el lugar del usuario y equivocarse (¿equivocarme? ¡sí! los errores hacen que tu web sea mejor). Piensa que ya hay muchas apps en el mercado (y mucha competencia) y una gran demanda de aplicaciones útiles y que respondan rápidamente a la necesidad del usuario. Hoy en día todo el mundo tiene un smartphone que utiliza a diario y que tu negocio ofrezca esta solución te hará brillar. Vamos con el proceso de creación de una app móvil.

Si ya tienes una idea para tu aplicación, puedes saltarte este punto. Si no es así, lo que realmente necesitas es buscar un problema o necesidad al que darle solución (están por todas partes). Si pensamos en los empresarios que han tenido éxito en el desarrollo de apps móviles, estos han sido capaces de resolver problemas de los usuarios de una manera simple. Si miras a tu alrededor, cada producto y servicio que utilizas fueron creados para cubrir una necesidad, por lo que trata de buscar esos problemas o necesidades en tu vida diaria y realiza una lista. Una vez que tengas una lista exhaustiva, ya puedes empezar a pensar en cómo puedes resolverlos.

Tener una gran idea o encontrar un punto del mercado al que no esté dando un producto o servicio es el punto de partida en cada nuevo proyecto. Antes de ir directamente a detallar embargo, debe definir claramente el propósito y la misión de la aplicación móvil y responder a ¿Qué va a hacer la aplicación? ¿Cuál es su atractivo principal? Fidelización, uso recurrente (es decir que hay contenido dinámico por ejemplo) o uso único (imagina una app que sólo vale para hacer una felicitación de navidad, pues lo normal es que después de navidad el usuario la desinstale).

Este punto nos va a marcar el análisis a posteriori que tengamos que hacer para saber si es normal las tasas de desinstalación, recurrencia de acciones…etc  ¿Qué problema concreto va a resolver? ¿Qué necesidad va a cubrir?. También es muy importante saber si vamos a querer una aplicación móvil nativa la cual será mucho mas cara ya sea por desarrollo propio o a través de una plataforma, si por contrario vamos a crear una aplicación web ya que esta será mucho más sencilla y barata o si optaremos por hacer una híbrida lo cual te aconsejo.

Realizar una investigación en el mercado objetivo demostrará que existe una demanda para la aplicación y que no eres el único que lo considera necesario. Una de las posibles maneras para validar tu idea es utilizar la herramienta Google Keyword Planner, analizando el número de usuarios que buscan solución a ese problema. También puedes crear una landing page que detalle la idea de la aplicación y dar la opción de ampliar la información a los usuarios que lo soliciten por correo electrónico.

Otra posibilidad es analizar las tiendas de aplicaciones. Analiza qué aplicaciones tienen éxito y qué tipo de problemas resuelven. Muchas veces podemos encontrar aplicaciones que dan solución a un problema pero no de la mejor manera, y sin embargo tienen éxito por ser la única o de las pocas existentes. En ese caso debes plantearte si la aplicación a desarrollar es capaz de mejorar la ya existente y abarcar ese mercado. Si por contra tu negocio o web ya está impulsado y se ha demostrado que ya funciona te recomiendo que crees una app ya que está terminará de impulsar tu negocio.

En este paso tienes que decidir quién va a crear la app. Por un lado están las agencias de diseño de apps y consultores, que son la mejor opción cuando la app es a medida y quieres funcionalidades que no existen en el mercado y, por otro, las plataformas para crear la app tú mismo (sin necesidades de tener conocimientos técnicos), que están pensadas para apps nativas más  «simples» (aunque también terminarás necesitando a alguien que te ayude con el ASO y el testeo de la app).

Una vez que tengas una idea clara y que sabes que hay demanda para la aplicación móvil, es necesario registrarse como desarrollador en aquella plataforma en la que quieras desarrollar tu app, ya sea Android, iOS o Windows Phone. No te dejes intimidar por la palabra “desarrollador”, no significa que tengas que ser el programador, es simplemente el nombre que se utiliza para la persona encarga de publicar las aplicaciones. Esto lo tendrás que hacer ya seas tu el propio desarrollador o si utilizas una plataforma pero vas a ser tu el que la publique. En caso de que sea un tercero el que la publique no tendrás que preocuparte por esto.

Dependiendo del objetivo de la app va a ser mejor desarrollarla en Apple iOS o Google Android (en una de las dos), ya que vas a estar en tiendas de aplicaciones con mucha demanda (también mucha competencia, que no se te olvide). Por ejemplo, los usuarios de iOS son más propensos a hacer compras en apps o pagar por descargarse una aplicación. Además depende del mercado dónde lo queramos posicionar tendrá más sentido crearla en Android o en IOS (hay que analizar el volumen de dispositivos por sistema operativo).

La contratación del desarrollador puede ser un proceso largo, pero es un tiempo bien empleado ya que de él va a depender en gran parte el éxito del proyecto. Hacer una buena elección te evitará retrasos innecesarios, costes innecesarios y frustración en el futuro. Analiza sus anteriores trabajos para ver sus habilidades a la hora de plasmar las ideas en una aplicación. Comprueba que comprende bien tu idea y que es capaz de desarrollarla en su totalidad. También puedes acudir a empresas especializadas que cuentan con varios desarrolladores y una amplia experiencia para asegurarte unos mejores resultados.

Desarrollando bocetos sentarás las bases para la futura interfaz. En este paso tienes que conceptualizar visualmente las principales características, el trazado aproximado y la estructura de la aplicación. Tener un primer esbozo de la aplicación te ayudará  a comprender el objetivo de la app, ya que se van a utilizar como referencia para las próximas fases del proyecto. Esto es muy importante hacerlo en cualquier caso ya seas tu el propio desarrollador pues te va a permitir trabajar más eficientemente ya sea por tu cuenta o a través de una plataforma o si contratas a alguien ya que esto le dará una idea mucho más precisa de lo que realmente estás buscando.

Los bocetos son probablemente lo más importante a la hora de crear una app, es una idea que sacas de tu cabeza y que tienes que plasmar para que tanto tu como el desarrollador lleguéis al mismo punto.

Ya sea con papel y lápiz o utilizando medios digitales como Photoshop, lo importante es dar forma a lo que tienes en la cabeza de manera que un programador pueda empezar a entender lo que tratas de crear. Para este paso resulta de utilidad fijarse en otras aplicaciones ya existentes que sirvan como inspiración y modelo del que podamos extraer ideas. De esta manera facilitaremos la comunicación con el programador. Si tienes ya tu negocio o web creado simplemente trata de conseguir reflejarla en una aplicación tratando de hacerlo más intuitivo, además existen plataformas que transformarán directamente tu web en una app.

Esta es una fase en la que solo tendrás que participar si eres tu el que va a desarrollar la propia aplicación de una forma profesional. En esta fase las ideas y las características principales de la app se ven más claramente. Wireframing es el proceso de crear una maqueta o prototipo de la aplicación. Existen muchas herramientas online para crear de prototipos de apps. Las más populares son Balsamiq, Moqups, y HotGloo, que te permiten colocar y estructurar todos los datos y gráficos representativos en su lugar, además de añadir funcionalidad con la colocación de botones, de modo que puedes navegar a través de tu aplicación. Este es uno de los pasos más importantes si desarrollas tu propia app.

Crear una app no es algo sencillo (sobre todo si lo vas a hacer por tu cuenta) y puede dilatarse aproximadamente 3 meses.

Si no vas a hacer un wireframe ya que vas a encargárselo a un especialista o lo vas a hacer a través de una plataforma te recomiendo que crees un storyboard que se trata de un guión gráfico para saber como quieres que el usuario de la futura aplicación navegue a través de tu app, esto deberás hacerlo tanto para trasladárselo al profesional que hayas contratado o si estás haciéndolo a través de una plataforma pues te ayudará enormemente. Si eres tu el que estas desarrollando tu app vas a tener trabajo doble mientras que estás trabajando en los wireframes también tienes que empezar a crear el storyboard. Tampoco hace falta que sea muy preciso o perfecto simplemente una idea general es suficiente.

Este es un paso que solamente tendrás que dar si vas a desarrollar tu mismo la aplicación, ya que con las plataformas que existen para la creación de apps no es necesario que aprendas a toquetear este tipo de cosas. Te estarás preguntando que es el backend, pues bien es la parte del desarrollo de la aplicación que se encarga de que toda la lógica funcione, en definitiva, el conjunto de acciones que pasan por la app pero que no vemos, es por ello que si vas a hacer tu la propia app te recomiendo que aprendas un poco sobre varias formas de programar de cara al servidor, sobretodo en PHP (lenguaje de programación) o en Node.js (es el recomendado para una aplicación nativa) que es un entorno que ejecuta JavaScript en el servidor de forma gratuita.

Usa tus wireframes para pedir opinión sobre la aplicación a amigos, familiares, colegas y expertos para crear un primer prototipo. Si es posible, invítales a tu estudio y haz que prueban el prototipo en frente de ti y del desarrollador jefe. Dales acceso al wireframe y deja que prueben la app a fondo. No dejes que se vayan sin que te den una opinión honesta, que te ayudará e identificar fallos o enlaces sin salida. Monitoriza cómo utilizan la aplicación, tomando nota de sus acciones y adaptando la interfaz de usuario UI/UX a ellos.

Si por contra, lo estas desarrollando a través de una plataforma, hay algunas que te permiten descargar cualquier versión en tu dispositivo para que vayas probando los avances que estás haciendo. Como si la desarrollases tu es importante que lo des a probar a la gente para descubrir fallos o nuevos usos que ni siquiera te habías planteado. Si lo estás haciendo a través de un profesional pídele que te deje probarlo de vez en cuando.

Ahora que ya has definido definitivamente la aplicación, es el momento de empezar a trabajar en el back end del sistema. El desarrollador tendrá que configurar servidores, bases de datos, APIs y soluciones de almacenamiento. Es un trabajo bastante complicado si lo quieres realizar por ti mismo como has podido ver en el paso anterior, puedes empezar a definirlo tú pero si no tienes nada de experiencia te recomiendo que para que no la líes confíes en un profesional que plasmará perfectamente tus ideas. Si vas a desarrollar una aplicación nativa esta es a mejor solución pues te permitirá un mayor grado de personalización.

Por otro lado, si te quieres quitar totalmente de rollos y temas de programación lo mejor que puedes hacer es hacerlo a través de una de las plataformas que te expondré a continuación ya que dicha plataforma realiza todo este trabajo por ti lo que puede ser una solución que te ahorre dinero y sobretodo muchísimo tiempo aunque te puede dar problemas según el grado de personalización que estés buscando. Es la solución recomendada para la creación de una App web ya que al tener claro como va a ser tu aplicación dejar que una plataforma lo haga por tí te resultará mucho más sencillo.

Las skins o frontend son lo que los diseñadores/desarrolladores llaman a las pantallas necesarias para la aplicación, básicamente, si antes habíamos estado definiendo la parte que no se ve de la aplicación ahora tendremos que definir la parte visible, es decir, los elementos gráficos que van a componer la parte visible de nuestra app. El trabajo del diseñador será crear versiones de alta resolución de lo que antes eran wireframes. En definitiva convertir bocetos y notas de papel (incluidos post-it) en archivos digitales que se puedan ver en alta definición. Este paso es vital para que tu aplicación acabe teniendo éxito ya que esta será la parte que estará en contacto directo con el usuario por eso asegúrate muy bien de saber lo que haces.

Si lo vas a hacer tu mismo es recomendable que antes conozcas un poco de lenguaje de programación, además de manejar programas como Photoshop o Illustrator por eso te recomiendo que acudas a un diseñador profesional o que lo hagas a través de una plataforma ya que simplifica el proceso y puedes añadir los elementos que tu quieras en un enorme abanico de posibilidades sin tener absolutamente ni idea de programar aunque es cierto que muchas veces no obtendrás el grado de personalización que deseas. Los lenguajes más comunes para programar aplicaciones son Java, JavaScript y HTML, si deseas hacer una aplicación web simplemente te bastará con el lenguaje HTML mientras que para una aplicación nativa deberás aprender Java o JavaScript.

Una vez que tu o el diseñador acabe de diseñar las skins o las pantallas ya sea mediante programación o a través de una plataforma, todo estará listo para otra ronda de pruebas. No pienses que todo está listo con los pasos que has dado hasta ahora. Por primera vez tienes ese concepto en formato real, con todos los gráficos y todo el texto insertados, lo que significa que puede empezar a testear la aplicación en su diseño previo a la publicación en la App Store.

Solidify y Framer son buenas aplicaciones de pruebas para poder probar tu aplicación. Estas aplicaciones permiten importar el diseño de la aplicación y añadir enlaces donde sea necesario para probar el flujo de pantalla a pantalla. Si lo estás creando a través de una plataforma normalmente las plataformas te permiten que a través de un código QR poder descargarla en tu teléfono y ver como va la cosa. En todo caso, te recomiendo que la pruebes con mas gente ya que es posible que detecten fallos que tu no.

A medida que siga el desarrollo tendrás que tener una mirada constante y crítica en tu nueva aplicación. En Android, por ejemplo, el archivo de la aplicación es fácil de instalar en un dispositivo para probar su funcionalidad en un entorno real. iOS, sin embargo, es diferente ya que requiere una plataforma como TestFlight para descargar y probar la aplicación a medida que avances en el desarrollo.

Una vez que has dado sometido a todas las pruebas posibles al diseño de tu app y has recogido más feedback de los futuros usuarios, debes utilizar estas nuevas ideas para pulir la idea, el uso y el objetivo de la aplicación. Todavía puedes cambiar el diseño o pedir a tu desarrollador que haga cambios y mejores en el backend o el frontend. Esto probablemente te supondrá un mayor coste o un atraso en la publicación final de la aplicación pero te merece la pena para que lo que desarrolles llegue a buen puerto.

Si lo estás haciendo a través de una plataforma esto será muchísimo más sencillo pues la aplicación te permitirá hacer un desarrollo cambiante y modificable en cualquier momento aunque si bien es cierto que las opciones son mucho menores que si estás desarrollando tu mismo la app. Es crucial que escuches la opinión de los demás por que es común que al ser tu aplicación te obceques y solo puedas ver desde tu punto de vista pero puedes estar cometiendo errores ya sea en el diseño o en el uso que hagan que tu aplicación se vaya al traste.

En las App Store existen millones de apps, por lo que para lograr tener éxito es necesario optimizar la aplicación. Para ello, hay que tener en cuenta una serie de aspectos que pueden influir en las descargas logradas. Tendrás que optimizar tanto el contenido como el apartado gráfico si quieres que tu aplicación pueda llegar a tener éxito, escoger ciertas palabras clave, usar ciertos iconos y descripciones, realizar promoción externa al mercado de aplicaciones o contratar publicidad son algunas de las técnicas que se pueden aplicar. Aquí te dejo todos los factores que tienes que tener en cuenta:

Una vez probada la aplicación y realizados los cambios necesarios es el momento de publicar la aplicación en las App Store. Android, por ejemplo, no revisa las aplicaciones recién enviadas de inmediato. Ellos la comprobarán en algún momento para ver si funciona, pero la aplicación se publicará casi al instante en Google Play. Al contrario, el tiempo que Apple se va a tomar para revisar y aprobar o rechazar tu aplicación dependerá de si vas a enviarlo como individuo o como una empresa. Si es un individuo, toma de tres a siete días. Si es una empresa, tendrás que esperar de siete a 10 días. Hay numerosas plataformas que se encargan ellas mismas de realizar todo este proceso por lo que te será más cómodo pero almacenarlas te costará un poco más que si lo haces tu mismo.

Para superar esta espera hay algo que puedes hacer: presentar la app en PreApps. Se trata de un mercado de aplicaciones que ofrece a los desarrolladores la oportunidad de llegar a «early adopters», que son usuarios a los que les gusta probar cualquier app nueva en primer lugar. Esto es algo muy útil para poder empezar a recibir feedback muy valioso de gente que se dedica a esto y que te podrá ser de gran ayuda, es una comunidad que funciona bastante bien y que podrá decirte si va todo por buen camino o hay que empezar a trabajar en la siguiente versión. Esto es recomendable sobretodo si desarrollas tu la aplicación o lo haces a través de un diseñador.

El DIY (Do It Yourself) o Hazlo Tú Mismo es un movimiento es imparable y el sector de las apps no es menos. Si tu presupuesto es bajo y puedes permitirte contratar a una agencia o desarrollador especializado en la creación de apps, exiten decenas de plataformas con las que podrás crear tú mismo la app sin necesidad de tener ningún conocimiento técnico. Realmente son perfectas para una primera fase y para introducirte en este mundo, ya que son muy fáciles de utilizar y de entender (piénsalo con el WordPress de las apps, donde con saber arrastrar elementos puedes crear una aplicación móvil). Estas son mis plataformas preferidas:

Como habrás podido comprobar, el proceso de diseño y desarrollo de una app nativa es largo y tedioso, ya que hay muchas cosas a tener en cuenta (sino todos tendríamos nuestra propia app). Eso sí, el trabajo tiene recompensa y son muchos los beneficios que tu, tu negocio y tus clientes podréis obtener. De hecho, todo tienda a la automatización de procesos, y una app te va a ayudar a llegar a ese punto mucho más rápido. Una vez que la tienes lista, no te olvides que hay que promocionarla y conseguir muchas descargas (para llegar al TOP 10 debes captar muchos nuevos usuarios en muy poco tiempo). Tampoco te olvides de analizar los comentarios de los usuarios para mejorar la aplicación y lanzar nuevas versiones mejoradas.

Lanzar una aplicación en la App Store o Google Play es un camino de no retorno donde tendrás que seguir trabajando en la app y mejorándola indefinidamente. Si lo haces, tendrás mejores valoraciones, lo que catapultará la app a las primeras posiciones. El feedback de los usuarios será clave en el éxito (y hacerles caso) y en la incorporación de nuevas funcionalidades que no habías previsto. Tanto si vas utilizar una plataforma para crear la app tú mismo como si vas a contratar a una agencia o desarrollador especializado, ármate de paciencia e intenta tener orden a la hora de plantear el proceso.

¿Qué te ha parecido mi guía para crear una app desde cero? ¿Estás pensando en crear una aplicación para tu negocio? ¿Ya has diseñado y desarrollado una app pero te planteas mejorarla? ¿Prefieres hacer tú mismo la app o contratar a una agencia o consultor? ¿Crees que me he dejado algo? ¿Te has quedado con alguna duda o pregunta? Entonces te pido que dejes un comentario. Da igual que sea o una duda o un simple gracias, pero me alegraré mucho de leerlo y responderlo.