Qué Es CROWDFUNDING y 12 Mejores Plataformas [+TIPS]

Siendo honesto, hasta hace muy poco, si querías sacar un proyecto adelante necesitabas financiación, tenía que ser ofrecida por alguna de las vías tradicionales. No hay mucho donde elegir, porque las opciones se centran en un préstamo bancario, una subvención o pedir dinero a tus familiares o amigos. Las posibilidades de conseguir el dinero para llevar a convertir en una realidad tu idea eran limitadas y desaniman a muchos emprendedores.

Sin embargo, es algo que ha cambiado para siempre con las plataformas de crowdfunding. ¿Qué es una plataforma de crowdfunding? Una plataforma de crowdfunding o micromecenazgo es una especie de financiación colectiva en donde un grupo de personas aportan pequeñas cantidades al proyecto. Este dinero va destinado a los esfuerzos o iniciativas de una persona específica o de una organización.

En la actualidad existen muchas páginas de crowdfunding y un sinfín de proyectos financiados con esta vía. De hecho, aunque no lo creas, han revolucionado el sector de la financiación de proyectos, tanto proyectos personales, empresariales y solidarios, cambiando las reglas del juego y dando más posibilidades a las personas o empresas que quieran crear nuevos productos o servicios.

¿En qué consiste el crowdfunding? La respuesta depende mucho del tipo de crowdfunding que se persiga, ya que existen varios tipos: donaciones, recompensas, inversión o préstamos. En general el ciclo del crowdfunding consiste en un emprendedor que publica todos los detalles sobre su proyecto en una plataforma crowdfunding específica. El es responsable de mostrar toda la información sobre el proyecto, como la descripción de la iniciativa, la cantidad de dinero que necesita, el tiempo de recaudación o las recompensas que podrán ser obtenidas.

Después de ser valorado el proyecto por la plataforma en cuestión, el mismo es publicado por una cantidad determinada de días en los que se espera recolectar el dinero requerido (esto depende del tipo de proyecto, por lo que puede ser unos días o meses). En este tiempo se promociona lo máximo posible (tanto la persona o empresa que lo crea como la plataforma de micromecenazgo), para que al final del plazo se decida si va a ser financiado o no (si se consigue el objetivo de dinero o no).

En este sentido debes saber que las plataformas de crowdfunding funcionan cogiendo un porcentaje de todas las recaudaciones (que varía según el tipo de plataforma). En Kickstarter, la mayor plataforma de este tipo a nivel mundial, te cobran un 5% de lo recaudado (otras plataformas varían estos porcentajes de acuerdo a sus normativas). Tienes que tener cuidado con lo solicitas porque, nuevamente (y dependiendo de la plataforma), tendrás un límite de tiempo para alcanzar la meta (un máximo común es de 30 días a 60 días).

En caso de que no llegues a la recaudación objetivo, la herramienta de crowdfunding no te cobrará ningún porcentaje, puesto que el dinero será devuelto a los usuarios, lo que anima a lanzarse en esta aventura colectiva. Otro dato importante a conocer antes de involucrarse en este de financiación colectiva es que debes asegurarte de que la plataforma admita proyectos en tu país (hay algunas que solo permiten proyectos en EEUU, Canadá, Reino Unido, Australia y Nueva Zelanda y otros países).

El crowdfunding te sorprenderá por la cantidad de beneficios que te ofrece en relación a las soluciones tradicionales. Una de las ventajas más importantes de optar por esta innovadora forma de financiación colectiva es que el número de usuarios que se animan se incrementa año tras año. ¡Pero eso no esto! Entre las ventajas más destacadas del crowdfunding encontrarás:

Si quieres probar a financiar tu proyecto a través del crowdfunding, hay muchas y variopintas plataformas online pensadas para todo tipo de proyectos y usuarios. Hay algunas que están más enfocadas en ciertos perfiles de emprendedores, otras para startups, otras para causas sociales y un largo etc. Por ello, entre tantas opciones he escogido las que te recomiendo y que considero las mejores para esta clase de iniciativa:

Aunque las plataformas de crowdfunding representen ventajas innegables, también es innegable que representan un reto, ya que requieren de cierto conocimiento. Esto debido a que, a diferencia de un fondo de inversión con el cual puedes crear proyecciones, en este caso te diriges a un público inversor desconocido. Si crees que el crowdfunding se trata de subir un proyecto y agregar un video explicativo para pedir dinero, vas por mal camino. Por ello, deja que te explique cómo crear una campaña de micromecenazgo paso a paso que llegue al éxito:

Puede sonar obvio, pero he visto muchas campañas de crowdfunding sin un producto o servicio listo para ser visto. Si vas a vender algo, sea lo que sea, tienes que tener al menos 1 funcionando. Es básico, ya que sino va a ser muy complicado vender la idea al posible inversor. ¿Tu ayudarías a lanzar un proyecto que ni siquiera se ha tomado la molestia de crear un prototipo o muestra? Yo, personalmente, no lo haría.

El plan de marketing y comunicación es, en resumidas cuentas, una hoja de ruta esencial si quieres llegar a la recaudación objetivo. Por ello, piensa muy bien los pasos que vas a dar antes, durante y después de la campaña de micromecenazgo y adelántate a cualquier eventualidad. Piensa en un mensaje claro y efectivo, crea los elementos gráficos y audiovisuales (logo, vídeos, textos, etc) y determina tu público objetivo y los canales que vas a utilizar para llegar a ellos (aparte de la propia plataforma de crowdfunding).

Eso sí, aunque el propósito principal del crowdfunding es obtener dinero o financiación (es de conocimiento público), nunca lo pidas directamente. Hay formas de expresar el mensaje «necesito financiación para mi proyecto» sin llegar a explícitamente pedir dinero (algo que de por sí desagrada a muchos contribuyentes). Lo mejor que puedes hacer es no utilizar palabras como «donativo» o «pedir». Utiliza mejor palabras como «incentivo» o «descuento» o frases como «cosas que podrás hacer cuando este proyecto se convierta en realidad».

Tienes un prototipo funcionando, pero ¿Tienes una página web en donde mostrar toda la información? ¿Has creado los perfiles sociales para dar conocer el producto o servicio y a promocionar la campaña? Preparar todas las herramientas online que vas a necesitar para el proyecto el vital para tener éxito en el lanzamiento de una campaña de crowdfunding. Piensa que, aunque la plataforma ya te hace llegar a miles de usuarios, un trabajo de difusión externo hará que llegues a muchos más.

Es una forma perfecta de que la gente te vaya conociendo antes incluso de que inicies la campaña de micromecenazgo y, cuando la lances, ya tengas un círculo de usuarios que la apoyarán. De hecho, te animo a que en sitio web permitas la opción de que a cualquiera que le interesa, se suscriba a una lista de correo (donde estará avisado de todas las novedades del producto o servicio). Si tienes, por ejemplo, un gadget muy interesante, muestra de lo que es capaz, explica qué necesitas para que sea una realidad y ofrece la opción de que puedan estar al día de cualquier cambio o novedad.

Las historias bien contadas llegan al corazón del lector y venden. Si en ese momento logras conectar con esa persona, se convertirá en tu microinversor. El público de la campaña de crowdfunding quiere saber cómo has llegado hasta ahí, de qué manera se te ha ocurrido la idea y por qué decidiste que era importante llevarla a cabo. Normalmente en las campañas se expone un problema y el proyecto se constituye como una herramienta capaz de solucionarlo.

Uno error muy habitual en este tipo de campañas es no determinar una acción (call to action). Necesitas explicar a tus contribuyentes lo que producirán sus apoyos, por lo que piensa muy bien qué vas a ofrecer a los usuarios que decidan invertir en tu proyecto. No importa el tipo de proyecto del que se trate, porque en todos se persigue algo: descuento de un % en el producto final, regalo de un extra, lograr que los niños de la comunidad rural puedan leer por la noche. La idea es crear empatía con el usuario y su bolsillo.

Ya conoces las mejores plataformas de financiación colectiva. Sin embargo, lo principal es que escojas una que combine con el tipo de proyecto que quieras desarrollar (recuerda que hay no es lo mismo una razón social con el lanzamiento de un nuevo producto o servicio). Hay páginas de crowdfunding con objetivos diferentes: recompensa, donativos, capital y deuda. Kickstarter y Donadora son ejemplos de plataformas de recompensa y donativos, mientras que Play Business y Crowdfunder lo son de capital y deuda (en los que se obtienen acciones o rendimientos por medio de tasas de interés).

Cuando lances la campaña de crowdfunding, aunque la propia plataforma ya llega a muchos usuarios, a veces no es suficiente. Por ello, existen otras plataformas especializadas en potenciar campañas de crowdfunding. Una de las mejores, si te decides por Kickstarter, es Kickbooster. Esta página permite a cualquier persona ganar dinero difundiendo las campañas. Basta con crear una cuenta, elegir una o varias campañas y compartir en el enlace en sus activos digitales.

Aunque hayas recaudado el dinero que esperabas (incluso más), pero esto no significa que sea el final de tu relación con tus inversores, porque puedes convertirlos en tus embajadores. Piensa que son ellos los que van a usar el producto o servicio y te darán sus valoraciones. Además, debes mantenerles al día de cualquier novedad sobre el proyecto y de que cualquier información que necesiten. Después de todo, la regla de oro del crowdfunding consiste en recibir y dar.

Lanzar una campaña de crowdfunding para financiar tu proyecto es mucho más que hacer un video explicativo pidiendo dinero. Ten cuidado con los pasos que das para intentar conseguir financiación a través del micromecenazgo, ya que son muchos los proyectos que fracasan por no seguir ciertos pasos críticos. Aunque no existen recetas mágicas, como el gran objetivo es diseñar una estrategia de captación que responda a las necesidades tu público objetivo, siempre ayuda tener las cosas claras desde el principio.

El crowdfunding es, cada vez más, una de las opciones para emprender de una forma activa e innovadora. Es, de hecho, algo muy novedoso y potenciado por las redes sociales, ya que si consigues llegar a un inficionado, es probable que llegues también a su círculo. Prepara a conciencia todo lo necesario para explicar las ventajas de tu producto o servicio al usuario (enfrentarlo a tu competencia funciona muy bien) y ofrece una recompensa a cambio de su confianza.

¿Qué te ha parecido esta completa guía del crowdfunding o micromecenazgo? ¿Conocías este método de financiación colectiva? ¿Has lanzado ya alguna campaña en el pasado? ¿Estás valorando financiar tu proyecto con este tipo de iniciativa? ¿Crees que me he dejado algo? ¿Tienes alguna experiencia que quieres contar? ¿Te has quedado con alguna duda o pregunta? Entonces te pido es que dejes un comentario. Da igual que sea o una duda o un simple gracias, pero me alegraré mucho de leerlo y responderlo.